¡Hola, buenos días!
Nuestra segunda entrada en el blog de Bar Carmela será para contaros una receta típica de la cocina tradicional sevillana, y lo haremos como si fuera un cuento.
Hablamos de la receta de la «tortilla española” ó tortilla de patatas» de toda la vida, que echándole tiempo y cariño es una auténtica exquisitez.
Muy oportuna, por cierto esta receta…lo decimos porque ahora más que nunca ese sentimiento de españolidad no puede estar más a flor de piel, habiendo ganado la copa de Europa de baloncesto y teniendo la mejor y más famosa tortilla del mundo entero…
¡Por Dios !
¡Por España!
¡Y por la tortilla!
Bueno pues comenzamos con la receta de la tortilla de patatas:
Ingredientes:
Para una sartén de 24 cm de diámetro emplearemos los siguientes ingredientes:(dependiendo de la sartén que vayamos a emplear la cantidad aumentará o disminuirá)
- 5 Patatas migosas
- 7 huevos hermosos
- Aceite de oliva, para freír las patatas y después para hacer la tortilla, diría que….un litro
- Media cebolla troceada en juliana
- Sal
Modo de hacerla:
Las patatas una vez mondadas, lavadas y cortadas en rodajas muy finas, se van friendo, a fuego obediente, en una sartén honda con aceite de oliva y un poco de cebolla que se echará, cuando ya están las patatas a medio hacer.
Se van picando con el filo de una espumadera, y despachurrándolas hasta hacer prácticamente una pasta. Se apartan y se escurren.
Batir bien los huevos, sazonarlos y en un bol mezclarlos con las patatas y revolverlos.
Por otra parte en una sartén de 24 cm y que no será ya tan honda, se echa un poquito de aceite de oliva, se calienta el aceite, y volcamos los huevos y patatas para dejar que se vayan cuajando.
Cuando estén doradas, que se nota porque al mover la sartén no se pega, se vuelven, ayudándose de un plato, hasta sobredorar por el otro. Nosotros la solemos volver varias veces para que quede bonita.
Alguna vieja guisandera “bañan”, la tortilla momentos antes de sacarla, con la yema de un huevo batido para dejarla de un bonito color oro.
Truco:
Os contaremos “la prueba del dedal de plata”, que la usaban las buenas amas de casa, y consistía en que cuando la tortilla estuviera tomando color, se clavaba el dedal sin resistencia en la misma, lo que significaba que ya estaba en su punto.
Bueno pues ahí os dejamos con vuestras mañas. Y si queréis pasaros por nuestro bar y hacer comparativo de sabores con nuestra tapa de tortilla de patatas, bienvenidos seáis.
¡Que os salga deliciosa!